Euskal Metal Fest VIII - Brutal Gaua

Tras cuatro intensas jornadas en esta octava edición del Euskal Metal Fest, era hora de poner fin a la edición de 2017 con el cartel más ambicioso que ha tenido jamás. Bajo el nombre ‘Brutal gaua’ se escondían todo tipo de géneros; crossover, industrial, prog y death metal.

 

Todavía me alegro, al escribir esto, de haber ido con antelación, pues hubo una errata con los horarios y A.D empezó 20 minutos antes de lo establecido. A causa de esto, la sala estaba vacía; unas 10 personas (incluyendo músicos y personal de la organización). Y aunque a medida que pasaba el tiempo iba llegando más gente, no hubo mucha participación por parte de lxs espectadores. El grupo mostró tener actitud, da igual que tocasen en una sala llena o para cuatro gatos, ellos iban a desempeñar el mismo papel. Quizá para algunos no, pero para quienes ya hemos visto en más ocasiones a Azken Deabrua, la canción “Disidente” pudo ser una sorpresa por contar con la colaboración de Txino de Storbais a las voces. Sin necesidad de un público animado, entre Igor y Txino montaron un revuelo en el escenario de lo más memorable. Pocas canciones más pasaron hasta cerrar con “Titan”. Un set de lo más corto, me hubiese gustado que contasen con más atención, pues se la merecían.

Six Burning Knives entraron a escena con unos samplers de música electrónica, y con animadas melodías comenzó su show. Al principio parecía que el ambiente se iba calentando, pero no fue así. Era un grupo de metal alternativo con toques de industrial, groove y metalcore. Tienen una técnica muy bien ejecutada y tocaron todos sus temas con mucha profesionalidad; se trabajaron muy bien el concierto pero a mí personalmente, no me transmitieron nada, me parecieron un grupo de Metal moderno más del montón. Todas las canciones tenían algo diferente entre sí, pero era como si ya las hubiese escuchado en alguna otra parte, puesto que usaban la misma fórmula de composición que otros grupos del género. Las apariencias tampoco eran muy originales; estaban “pintados” (o manchados) de negro, dando un aspecto industrial. Era un disfraz de lo menos llamativo. Por otra parte, me llamo la atención que el cantante en una ocasión sacase un megáfono, pues no entiendo qué efecto quiso lograr con ello. Además de todos sus intentos (fallidos) de intentar animar al público. Desde luego, él lo intentó. Al final del espectáculo imitaron lo que siempre suele hacer Hamlet en sus conciertos; pedir al público que se agache para después saltar. En este caso, no todo el mundo llegó a agacharse, y nadie saltó, solo se reincorporaron. A veces, por mucho que te trabajes la puesta en escena, el apartado visual, etc. si tu música no llega a transmitir nada, todo tu trabajo no sirve de mucho.

Quizá uno de los momentos más esperados de la noche fue el concierto de Lamprea, quiénes hicieron su debut y además presentaron los cuatro temas, uno de ellos una versión de Conquering Dystopia (la cual dedicaron en el concierto), que forman su primer EP. Tras seguir durante un par de años la pista del guitarrista, Borja, poder presenciarle en vivo iba a ser de lo más interesante, y sin haberme informado mucho sobre el grupo, descubrí que la formación era un trío dónde no había cantante, puesto que el grupo es puramente instrumental, y toda la fuerza se concentra en la técnica y virtuosismo de los músicos. A diferencia de los dos primeros (y el siguiente) grupos, Lamprea sonó espectacular. Fue cambiar el chip y estar escuchando algo totalmente diferente a lo anteriormente presenciado. Se podrían catalogar puramente en el metal progresivo, sin inclinarnos a ninguna otra fusión de géneros como thrash o death. La sala estuvo bastante llena y, creo que sin excepción, todxs quedamos alucinados del nivel que pudimos ver. Transmitieron mucha energía con un set muy corto pero intenso. Qué más puedo decir, las canciones estaban llenas de diferentes secciones y algunas contaban con samplers. Eso sí, aunque la mayor parte del protagonismo se la llevó el guitarrista, el bajo o batería no se quedaron atrás pues el nivel de ambos también estaba por la estratosfera. Le queda mucho por recorrer a este joven grupo, de momento solo puedo decir que fue un debut brillante, y que si siguen así, llegarán muy lejos.

Tras una breve pausa en la que aprovechamos para entrevistar a Obscura sucedió un fallo técnico que retrasó la actuación de Bloody Brotherhood unos veinte minutos. No tuvo mucha importancia porque el adelantamiento que hubo en un principio sirvió para cubrir este percance. Además, a nosotrxs nos vino genial para no perdernos nada. No pasó mucho tiempo desde la anterior vez que pudimos verles, y en tres meses no han cambiado apenas. Sí que podría decir que la formación es cada vez más sólida, e incluso estuvieron a tres voces (bajo y guitarras). El sonido dejo bastante que desear, apenas se oía el bajo y las guitarras estaban demasiado agudas, pero es comprensible teniendo en cuenta los problemas técnicos. Me gustaría mencionar también que el ritmo marcado por la batería no era muy precioso y a veces iba a descompás. Pero pequeñeces aparte, arrasaron como siempre. Cabe mencionar también que siguen presentando su Split LP con Karonte. El setlist se quedó algo corto y debido a la presión, parece que todo fue más deprisa de lo planeado, y la actuación de Obscura llegó enseguida.

Tras seis años sin pisar el estado español, los alemanes volverían a tocar en la misma sala que la última vez. La entrada fue espectacular y tanto el sonido como la iluminación era perfecta, brillante. Nunca pensé que un grupo pudiese sonar tan bien en esta sala, el técnico de sonido hizo maravillas. Su ejecución fue en todo momento precisa y como mucha viveza, quiero decir; era como escuchar el disco en casa pero sintiendo su presencia, su energía y su fuerza a unos pocos metros. Además usaron varios samplers, estos son exclusivos para conciertos. No pararon quietos y el bajista fue el que más se movió, se mostraron muy contentos pese a no llenar ni la mitad del aforo de la sala, lo cual hizo la velada aún más “familiar” y cercana. Interactuaron lo necesario con el público, aunque me da la sensación de que ellos no sintieron recibir la respuesta esperada. Por mí parte, no esperaba menos de ellos, fue un show de lo más fluido. Se hizo demasiado corto, y no tocaron el bis porque nadie lo pidió… Aunque estaban presentando su más reciente álbum, Akroasis, me hubiese gustado poder disfrutar de un set más variado, o largo al menos, porque no llegaron ni a una hora de actuación. Es mejor dejar con ganas que aburrir al público, eso es cierto. Esperamos volver a verles pronto, y que no pasen 6 años de nuevo, pues es una espera demasiado larga.

Muchas gracias a MPR Prods por contar una vez más con Static Age. Volveremos el año que viene en la novena edición. Como aperitivo hasta entonces tendremos el Zombie Jaialdia en septiembre, id apuntando los días 22 y 23 en vuestros calendarios.

 

Texto:Ekaitz Tejedor

Fotos: Itsaso Urkia

 

 

Enlaces de interés

MPR Prods: https://www.facebook.com/MPRproducktionsymanagement

Euskal Metal Fest: https://www.facebook.com/Euskal-METAL-Fest-652396804867207

Itsaso Urkia Photography: https://www.facebook.com/ItsasoUrkiaPhoto

Obscura: https://www.facebook.com/RealmOfObscura

Lamprea: https://www.facebook.com/lampr3a

Azken Deabrua: https://www.facebook.com/a.d.brutalcrossover

Bloody Brotherhood: https://www.facebook.com/BloodyBrotherhood

Six Burning Knives: https://www.facebook.com/sixburningknives


Share this Post in your Social Networks