Echando la vista atrás, cuesta creer que hayan pasado diez años desde la creación del proyecto que comenzaron Hugo Markaida y Javier Martín, guitarristas de la formación y que poco a poco se fue consolidando. En todo este lapso, ha habido tiempo para lanzar tres discos contundentes “Restore the Balance”, “Defying the gods” el reciente “End Vs Beginning” y hasta para saltar por donde les dejaran, por muy recóndito que fuera el lugar, con tal de darse a conocer y extender su música.
Anclados en el sonido del metal sueco, nunca han ocultado sus inclinaciones e influencias, siempre muy presentes en su música procedentes de bandas como In Flames, Dark Tranquility, Soilwork o At the Gates, por citar unos cuantos. Una combinación demencial que aúna lo mejor del incombustible death metal melódico y donde no faltan voces guturales entremezcladas con voces ligeras, guitarras afiladas y un montón de teclados o sintetizadores.
Con una sala abarrotada de colegas, familiares y un buen puñado de fans arrancaba la fiesta. Dispusieron de dos pantallas en el fondo del escenario, desde las que emitieron diversos videos con amigos que les felicitaban e imágenes a modo de recuerdo de este intenso periplo. Con la fuerza y la furia que les caracteriza, comenzaron a repasar su catálogo escogiendo un extenso repertorio que les permitiría recorrer en condiciones, su trayectoria. La concurrencia jalearía su actuación de inicio, pero los ánimos llegarían a caldearse en condiciones a medio bolo, desapareciendo los muñecos de cera de la parte delantera y ocupando su lugar hasta el final los más salvajes entusiastas, viviéndose una jungla continua con todo tipo de circle pits y campos de batalla, que se iban fraguando a medida que descargaban sus clásicos. Como no podía ser de otra forma, no faltaron a la cita algún excombatiente y viejos camaradas que dejaron su impronta, ayudando a hacer si cabe más grande la celebración. Por allí desfilaron Charlie e Iñigo de The Descent, Peter de Black Ocean Witness, Aimar de The Flying Scarecrow y Dann Hoyos de Space Octopus/The Flying Scarecrow.
Se mostrarían intratables durante toda su comparecencia y destacarían especialmente cortes estelares de su galaxia particular como “Redrum”, “Lost in Oblivion”, “Defying the gods”, “Decoding Reality, o “Rise from Drama”. En definitiva, apabullante actuación para celebrar la fecha como mandan los cánones y resarcir a una concurrencia que tenía ganas de jarana. Emotivo bolo que les serviría para rematar una década impecable y grabar un dvd para el recuerdo.
El broche final lo puso el sorteo comandado por el colega Dann Hoyos que se ocupó de agitar el cotarro y anunciar el reparto de los premios. Una velada inolvidable y el deseo de volver a repetir dentro de unos años.
Texto: Txema Garay
Fotos: Txemaiden